"El descubrimiento de un nuevo plato hace más por la felicidad humana que el descubrimiento de una nueva estrella." Brillat Savarin
04 junio, 2011
Un buen descanso en el Café Mozart
La mayoría de los cafés vieneses ofrecen almuerzo. A mi llegada entre el ajetreo de los recorridos paramos en pleno centro en el Café Mozart, que data de 1794, el cual fuera visitado frecuentemente por Graham Greene, gestando en Viena su guión para la famosa película protagonizada por Orson Welles El tercer hombre. En la película se dan cita los protagonistas en dicho café, pero la realidad es que no pudieron sino recrear sus exteriores en otro emplazamiento, ya que su parte exterior, de la terraza, había sido destruida por los bombardeos.
Elegante en su decoración, amplísimo, con una atención correcta comimos un menú de la carta, carta que hay que pedir, porque al ser turistas no la ofrecen como primera opción. Por ser Pascua nos sirvieron pescado, acompañado de un arroz con vegetales, todo ello bastante digno para ser un sitio tan turístico. Así que relación precio calidad, cuando lo que se quiere es comer algo sencillo es una buena opción, ya que el menú cuesta 10 euros. La carta tiene opciones de cocina austríaca en su mayoría.
No me fui sin antes probar una de sus tentadoras tartas vienesas, decantándome por la suave y esponjosa Kardinal, perfecta en su frescura y punto dulce que no llega a empalagar. Ofrecen desayunos desde 8 a 13 euros. Las tartas cuestan unos 4.70, al igual que el café, que lo sirven delicioso.
Albertina Platz, 2
A 1010 Viena
Austria
Teléf.: +43/ (0)1 24 100
Web: Café Mozart
Puntuación otorgada a las tartas
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Ahí sí que voy, Claudia. ¡Basta con ver el saludable aspecto de esa tarta!
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ResponderEliminarSiempre me llaman la atención los precios, Claudia, yo no encuentro sitios con esos precios. Qué suerte la tuya y que instinto bueno el tuyo, para encontrar lo mejor.
ResponderEliminarUn sitio más para anotar en la agenda. Además me gustan mucho los sitios con historia.
Un beso.
Voy a buscar la receta de esta tarta, no me resigno a no probarla ya mismo!!!
ResponderEliminarGracias por vuestro comentario. Isabel, si la encuentras estaré encantada, me metí en varias páginas alemanas y no di con ella con exactitud.... estaré esperando tu post.
ResponderEliminarSaludos a tod@s
El café Mozart, el café central y el Schwartzenberg Cafe son mis tres cafés favoritos de Viena, aunque, comer, lo que se dice comer, sólo lo he hecho en el Schwartzenberg. No sé si lo conoces, está en el Ring, enfrente del horrible monumento a los soldados soviéticos.
ResponderEliminarEn el Mozart, como en el Central, lo que he hecho es eso: tomar café. ¿Has probado el Cafe Farisär? es un café con crema y licor. Me encanta el nombre: "fariseo", porque nadie sabe si tomas alcohol o no. ;-)
Enhorabuena, te lo pasaste muy bien en Viena.
Qué bien, Sorokin, para el Schwartzenberg tengo ya un post escrito...
ResponderEliminarsaludos
Pewrmiteme que despues de vistar tu blog, haga la maleta y me adentre contigo por esos mundos de Dios, me parece super original y me gusta de manera especial , me hare seguidora y vendre a ponerme al dia y aprender muchas cosas y ademas te invito a que visites mi blog que tiene de todo un poco sobre todo cocina.
ResponderEliminartremendita-tremendita.blogspot.com
Besitos
Gracias, Tremendita, eres bienvenida y me daré una vuelta seguro por el tuyo.
ResponderEliminarQuerida Claudia:
ResponderEliminarSinceramente pienso que deberían contratarte como jurado profesional de concursos de pastelería. Acabas de provocarme la peor de las envidias sólo leyendo sobre cómo sabe el pastel!!!!
Un saludo
Gracias Claudia por estos apuntes de la ciudad de Viena, tan suculentos y tan prácticos, desde luego si la vida me hace volver a esta ciudad, que pisé unicamente en mi pobretona época de estudiante, le sacaré un jugo sabroso con sabor a chocolate y notas celestiales.
ResponderEliminarUn abrazo,
Es una delicia leer cada uno de esas recomendaciones (en primera persona) que nos haces. La tarta, con un buen café, debe ser como alcanzar el Nirvana.
ResponderEliminar¡Me gusta este nuevo rincón!
ResponderEliminarY ese trocito de tarta que nos muestras... argggggggggg... lleva mi nombre :D
Besos.
Gracias, por estos apuntes...
ResponderEliminartan suculentos!
Besos.
Esa tarta tiene una pinta impresionante pero, ¿desayunos de más de ocho euros? Con tarta incluída, supongo, o Viena es tan cara como la fama de cara que tiene...
ResponderEliminartengo q ir a Viena...
ResponderEliminarEsa Kardinal se ve fantástica.
ResponderEliminar10 euros por un menú aceptable en ese escenario?,aquí sería impensable.
Encantada, como siempre,de seguirte.
Besos.