23 agosto, 2011

No todo lo que brilla...


 Fuimos a desayunar al Café Prückel ya que aparecía no solo reseñado en la página oficial de Viena sino que también en el NY Times. El veredicto: decepcionante. Es un café bonito, con 100 años de historia, hermosamente conservado pero lo que ofrecen (como desayuno) se acerca bastante al timo si lo ponemos junto a sus precios, que sale por unos 10 euros si se quiere desayunar con huevo, por ejemplo y zumo de naranja. Los panes eran bastante malos al igual que  croasán, los cuales estaban poco frescos. El zumo tenía sabor a naranjas pasadas y la presentación bastante mediocre. La atención es apenas correcta.


 Echando un vistazo a la carta del mediodía, quizá está por debajo de las del centro, así que supongo que en el rango de comer por supervivencia es una opción socorrida para el turista. Ya que en el centro el famoso viener Schnitzel cuesta como media unos 14 euros y acá unos 10 (si su carta on line está actualizada).

La verdad, para desayunar no lo recomendaría nunca. Hay mejores opciones en Viena, sin duda.

Stubenring, 24
(Luegerplatz)
1010 Viena
Austria
 Teléf.: +43/ 1 512 61 15
 Web: Café Prückel