Hamachi con espuma de aguacate y wasabi y pequeños toques de kimizu.
Lo bueno de pregonar y ser fiel a una afición es que facilita mucho el trabajo para los amigos en los días de cumpleaños. Este año, una vez más, nos han regalado un vale para un restaurante magnífico, que, casualmente, ha recibido este año un estrella Michelin: Tramin. El joven chef, Daniel Shimkobwitsch fue pupilo de en el restaurante dos estrellas a cargo de Christian Jürgens y es quien está a cargo de la cocina, y de cara al público, su excelente y amable somelier Holger Baier, son parte de un jovencísimo equipo que le sobra entusiasmo y calidad.
El restaurante es sencillo y sin pretensiones, una decoración sobria, pero sobre todo, un ambiente relajado y cordial. Quizá, sigo echando de menos los manteles blancos para las cenas de calidad, como también se agradecería unas mesas más amplias. Aunque el espacio entre mesas está muy bien.
El menú de Tramin es cerrado, como suele ser en esta ciudad para los restaurantes de cierta calidad y se puede escoger entre el de cuatro, cinco, seis o siete platos, que se pueden combinar, si se quiere, con un extra de vino, con el maridaje escogido para cada plato de dicho menú. Pero si se quiere escoger de la carta, aparte de su excelente selección, los precios del vino son bastante moderados.
De entrada, como detalle para esperar sirvieron una delicada crema de guisantes, con dos pequeños aperitivos que ya iban preparando el camino al banquete. De primero, el exquisito hamachi (foto de apertura), es un pescado conocido en español como buri, que se consume en Japón o Perú. El pescado, cocido solo con el marinado, estaba servido con rábano, una salsa delicada de lima, acompañada con otra más espesa: la kimizu. El pescado también se complementaba con la espuma de aguacate y wasabi. Simplemente espectacular en su combinación de sabores y texturas, junto a alguna seta, espárragos finísimos y algas. Le seguía una suerte de pequeña ensalada de carne con una salsa verde de Frankfurt a manera de helado, acompañada con berenjenas.
Salvenius.
Y para comenzar con los segundos, un pescado Salvenius (según Wikipedia, salvelino), una mezcla de sabores entre trucha y salmón, cocido a bajísima temperatura por muy largo tiempo, acompañado de una delicada salsa, levemente dulce con pequeñas bolitas de dos tipos diferentes de melón y semillas de calabaza. Una textura tierna pero firme y una salsa ligera y fina.
Rape.
Seguimos con un rape en una cama de crema de piñones, acompañado con una salsa de apio*, una combinación interesante con el sabor levemente agrio de este vegetal, matizado por la cremosidad de los piñones. Para cerrar, carne (de res) en diferentes "versiones", servida, una en una salsa fina y para jugar con las texturas y sabores de lo crudo y cocido: tartar, servidos con pequeños trozos de coliflor.
Quizá el postre fue lo que menos levantó mi entusiasmo: musli de cerezas perfumado con hojas de apio de monte. La verdad es que estaba rico, con un hermoso centro hecho de cerezas que conservaba su bello color y era lo suficientemente ligero para cerrar una cena con tantos platos.
La atención es buena, aunque un tanto irregular por momentos. Sin duda, una fiesta para los sentidos, en la propuesta deconstructiva de Shimkobwitsch: belleza, ingredientes de alta calidad, platos originales, creativos y fresquísimos.
La relación precio calidad creo que es bastante buena. Los cuatro menú, van en escala de 70 a 100 euros sin vino. Un menú mínimo con sus respectivos vinos, 105 por persona, el máximo, 150. Esperemos que este equipo siga manteniendo su estrella, o quizá siga sumándoseles, por los momentos, que se mantenga, es bastante. Gracias a los amigos por este estupendo regalo.
Lothringerstr. 7
81677 Múnich, Alemania
Teléf.: +49 0 89 444 540 90
*célery o apio España
Aaaay, qué pena que Munich me quede tan a demano...
ResponderEliminarMe encanta ver los platos tan bonitos decorados y a parte se ven muy rico besos
ResponderEliminarTengo que aprender a no leerte sin haber comido... Una pena lo del postre, pero con todo lo demás se me ha hecho la boca agua, sobre todo cuando he visto el precio, muy ajustados para este tipo de restaurantes. Me alegra no ser la única que echa de menos manteles blancos en las mesas y sí, a los restaurantes con mesas enanas y poco espacio entre unas y otras voy una vez y no más. ¡Qué buen regalo de cumpleaños!
ResponderEliminarUn abrazo
¡Vaya es que no paras!, yo voy tomando nota de tus restaurantes, pero de momento todos me quedan lejos. Este menú para mi gusto: ¡una delicia!. Besoss
ResponderEliminarLucen las estrellas por todo el mundo y ahí estas tu para contárnoslo.
ResponderEliminarGracias.
Que maravilla de presentación!!!
ResponderEliminarUn lujo de platos.
¡Felicidades!
ResponderEliminarCon muuuuuucho retraso pero de todo corazón ;)
Un abrazo
Felicidades Claudia, aunque sea con retraso, el lugar y la comida se ven sin duda estupendos, pero más lo son tus amigos :-) Un abrazo.
ResponderEliminarMadre mía qué lujazo! Lo que daría yo por una cenita ahí...
ResponderEliminarCosa que no me extraña los plato lucen más que ricos.
ResponderEliminarBesos.
Que bueno!!....si alguna vez voy a Munich lo tomare en cuenta....veo que lo pasas fantastico!....me alegro.........Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarClaudia,los nombres de los platos ya en si son atractivos para mi gusto asi como la vista y el contraste de sabores me encanta.
ResponderEliminar!Qué lujo de menú, disfrutarías mucho con él!
Me llama la atención la decoración minimalista del restaurante también.
Un beso y que pases un fin de semana agradable.
Cuando fui a ese restaurante también me pareció estupendo, y eso que suelo guardar cierto escepticismo con los menús cerrados de tantos platos. La cocción de los pescados y la sutil integración de varios sabores en las salsas, lo que más disfruté, bueno, dejando a un lado el vino maridado. Espectacular los blancos que tomamos. Además he aprendido de lo que dice Dorothy, y acabo de leer tu entrada previo paso a la comida. Qué mejor abreboca!
ResponderEliminarNo me aburrire nunca de decir que me gustaria viajar tanto como tu, envidia snaa es lo que tengo, que lo sepas,,,creo que en tu mochila o malta ...no quepo,,,soy muy grandeeee.
ResponderEliminarBesitos guapa
Como siempre un post fantastico ,seguro que el menu estaba de vicio no hay mas que ver las fotos y los ingredientes .
ResponderEliminarOjala algun dia pueda viajar muco para visitar todos los fantasticos lugares que nos recomiendas.
Bicos mil wapa.
me encanta el diseño del restaurante
ResponderEliminarQue sitio tan guay! Los platos de nivelazo.
ResponderEliminarMuxutxuak
Ya hacia mucho que no me pasaba yo a ver tus "andurriales" por esos mundos de Dios !!!!! Menudo banquete ... ya veo que te costó un pastizal pero si merece la pena se da por bien gastado.
ResponderEliminarBesitos
¡ Cómo me gustaría acompañarte en tus degustaciones! ¡Qué suerte tienes!...jejeje!
ResponderEliminarBeso desde Argentina
woww que lujazo, yo quierooooooo! un besito
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